Mónica Rosas
Experta en gestión de Marcas
oct. 19, 2021
Hace dos semanas participé en el Illinois Grand Gathering 2021 y visité el Museo de Harley Davidson (Milwaukee). Como amante del marketing, mi intención inicial era ser testigo del poder de un lovemark, porque precisamente, no soy fan (y ni siquiera era usuaria) de ninguna moto.
El museo es una verdadera joya. Se exhiben todos los modelos, desde el primero de su historia hasta los prototipos en desarrollo, talleres de diseño, historias de uso relacionadas con las HD, motores en movimiento, entre otros.
Pero lo más relevante, es la forma de entender la vida HD, a través de un paseo por la historia de Estados Unidos; y su clara influencia más allá de sus fronteras, donde han conseguido crear un movimiento y un estilo de vida en torno a su producto, a nivel global. Y es que Harley Davidson ha conseguido ser una de las marcas de culto más importantes del mundo, porque como muy bien dicen: no venden motos, venden un estilo de vida (atmósfera de libertad, individualidad, poder, velocidad, autenticidad).
HD usó hace décadas uno de los cinco dominios de la Transformación Digital según David Rogers, el activo más importante: sus clientes. Hicieron real el enfoque del cliente céntrico, creando una marca de culto a través de relaciones genuinas con ellos.
Siempre escuché decir que HD es un símbolo de libertad, ahora sé que viajar en una HD es toda una experiencia única, sentir y pertenecer a una atmósfera de independencia: visualizar los paisajes, sintiendo el aire en el rostro, las curvas de la carretera y la velocidad.
Viendo manejar Harleys en una ruta de 5 días, a personas de todas las edades, muestra que el espíritu de la libertad no tiene edad. Algunos harlistas salen del trabajo diario y se liberan de horarios y etiquetas, disfrutan dejar los límites atrás pero al mismo tiempo se sienten parte de una comunidad HOG (o como este caso, el Illinois Widows Sons Grand Gathering 2021).
Como experiencia me llevo el haber compartido ese sentimiento de pertenencia de las tribus urbanas que HD lidera, es un ejemplo vivo de formación de comunidad alrededor de un producto, en este caso una marca icónica que crea lazos de pertenencia en todos los que la poseen.
Y es que lo que hace realmente único a las Harleys es su autenticidad y es absolutamente energizante descubrir cómo las marcas pueden lograr fans de por vida, no solo clientes.